“Actitudes para
investigar”
Por: Norma E.
Bermúdez V.
Se entiende que la actitud es la forma de actuar de una
persona o el comportamiento que emplea un individuo para hacer las cosas, y por investigar el conjunto de actividades de
índole intelectual y experimental de carácter sistemático, con la intención de
incrementar los conocimientos sobre un determinado asunto.
Es decir una actitud para investigar sería la forma de
actuar de una persona para llevar a cabo un conjunto de actividades intelectuales
y experimentales en busca de incrementar los conocimientos sobre un asunto
determinado, o bien es poseer la curiosidad que nos va a llevar a
querer saber y entender las cosas.
Partiendo de lo anteriormente expuesto y de que es
sumamente necesario para la educación en la actualidad incorporar la
investigación no sólo a nivel universitario, sino también en los planes de
estudio desde primaria hasta la media, queremos resaltar esas actitudes que
debe poseer todo buen investigador.
El investigador debe poseer características tales como:
la responsabilidad, motivación, interés, valores, compromiso, conocimientos,
entre otras cosas para llevar a cabo una investigación.
La educación en general no solamente debe contemplar la investigación
a nivel del estudiante, es importante que el docente también sea parte de la
misma, debe ser consciente que su participación permite dar aportes positivos a
la sociedad y a la educación.
Como docentes debemos interesarnos por los problemas de
la sociedad, esto además de hacernos más humanos, nos lleva a buscar soluciones oportunas a los
mismos.
Un investigador debe ser un buen observador, ya que al
observar con detenimiento su entorno puede detectar los aspectos relevantes que
deben ser tomados en cuenta al momento de realizar su investigación.
Otras cualidades como la responsabilidad, el compromiso, la
motivación y otras son las que deben caracterizan a un docente investigador
pues siendo consciente de su compromiso social y educativo, inyecta en sus
estudiantes el deseo de alcanzar metas que le abrirán camino en el quehacer
profesional.
La motivación es otro aspecto relevante a considerar en
un investigador pues al sentirse motivado por el tema se pronostican resultados
positivos y por consiguiente el éxito de la investigación, dando como resultado
mayores probabilidades de resolver los problemas tanto en la educación como en
la sociedad.
En conclusión debemos resaltar que como docentes
universitarios se hace indispensable el desarrollo de cualidades y actitudes
que motiven al estudiante a realizar investigaciones, desarrollando en ellos
conocimientos, de esta manera se lleva a los mismos a desarrollar su propio aprendizaje.
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